Sus celos eran evidentes
Jackie sintió una abrumadora sensación de ira mientras veía a la camarera acercarse a su marido. Sus pensamientos iban a mil por hora y se sentía especialmente confundida. No pudo evitar preguntarse qué podría haber escrito la camarera en esa nota

Jackie y su marido en los juegos
Exigiendo respuestas
Lo peor de todo fue que su marido sacó de su bolsillo el móvil inmediatamente después de leer la nota. ¿Estaba de verdad guardando el número de la camarera en su teléfono? Jackie, al borde un ataque de celos, volvió y exigió a su marido leer la nota. Sin embargo, para su sorpresa cuando comenzó a leerla, se puso a llorar.

Jackie posando con sus hijos disfrazados de minions